RISAS SOBRE NARCISO.
DERRAMANDO UNAS GOTAS DE TINTA
COMO FUGAZ CÓMICO QUE PINTA
al Narciso DE LAS MODAS
le pinto
QUIZÁS SIN UN ÁPICE DE RAZÓN
APOYADO POR MI EXPRERIENCIA LLAMATIVA
DE UN EXCEPCIONAL DÍA
DONDE QUIZÁS IRRESPONSABLE Y JOVEN
USURPE EL HERMOSO Y SUBLIME CUERPO DE NARCISO
CONDENSANDOSE LA RECREACIÓN DE SU DON EN MI CUERPO
COMO BELLA FIGURA
AYUDADO POR LAS ESTETICAS Y PROFUNDAS PALABRAS UTILIZADAS
EN LA TERNINACIÓN DE un poema
COMO DIVINA INSPIRACIÓN SIN REPETICIÓN QUE LO IGUALE
ALCALZANDO LA ETERNIDAD
Y ESCRITO EN EL ORDENADOR DE MI CABEZA
VISLUMBRANDOLO como SABIO RAYO DE LUZ
SOLEMNE Y ABSOLUTO
EN MÍ POSEIDO COMO MEMORIA RAM.
TODO LLEGA
EN EL CIELO DEL NARCISISMO ALZADO
DONDE ME ENCONTRABA
AL ENCONTRAR ESE MOMENTO MAXIMO DE INSPIRACIÓN POETICA
CUANDO REPENTINAMENTE Y SIN COMPRENSIÓN ALGUNA
SE FUE LA LUZ
BORRANDOSE DE MI MEMORIA TEMPORAL
EL POEMA,
VOLATIZANDOSE EL POEMA ETERNO
PUDIENDO RECUPERAR TAN SOLO PARA MI GLORIA
OLVIDANDO EL GLORIOSO silencio DEL MÍSTICO
COMO A LA EXCESIVA MIMICA DE GESTOS SIN VALOR
AL RECORDAR OLVIDANDO EL RAYO DE LUZ
UN sonoro TRUENO
PARA EL DIVERTIMENTO DE MI MEMORIA
CON TAN SOLO UN RAMILLETE DE PALABRAS
PARA RECONSTRUIR EL POEMA MENGUADO
PARA INTENTAR LLEVAR SOLENMENTETE Y COMO ALGO DIVINO
EL atuendo DE NARCISO:
Llevado por su ociosa dedicación
en los siglos que han de venir
de mitificarse como Narciso del tiempo
eterno
con su extasiado mirar adornado
con el marco de oro
de calculada ecuación resuelta y materializada
rodeando con su efusivo abrazo
al vistoso retrato o fotografía suya
donde se nos muestra como universal belleza y suprema del mundo
y exclamar
al compararse en sus retratos divinos
en el transcurrir de los años
¡maldito polvo que el tiempo nos trae!.
No es mi Narciso la flor mitológica
con raíces en el suelo
regado con el agua del río donde refleja la imagen de su rostro
mi Narciso es más actual y moderno
se pasea por los Museos
o se fotografía, vestido o desnudo, en monumentos
proclamando y queriendo ser
ser patrimonio de la Humanidad
ser patrimonio de la Humanidad
manifestando que hay que proteger todas las obras de arte
del polvo que en el tiempo las deteriora
y para ello hay que proteger
a las pretéritas, actuales y futuras
sin excepción disonante
con una vitrina de cristal
como sagrado espacio
y sobre todo para que el cristal se transforme en mágico espejo
donde reflejarse él como parte principal de la obra de arte.
Como antaño se admiraba reflejado
en el agua del rio cristalino
ahora busca incansable
ahora busca incansable
su enamoramiento necesitado
en donde no marchitarse
al reflejarse en el cristal
y siendo las obras de arte
el fondo del rio
y él la hermosura principal
al ser creadas, fotografiadas o pintados
para su mágica contemplación donde se ve reflejado
inigualable
para él de sí siempre