Francisco Cerrato Rubio: junio 2014

UNA OPINION MÁS: BAÑADEROS DE UCEDA EN EL RIO JARAMA.

Todo era bajar y subir, pero no todo era bajar y subir. Habían quedado como casi todas las tardes de verano para ir al rio, ya sea bajando por la charcuela, la cuesta, el camino del rubiato, o por el castillo, por la cuesta del reventón o por cualquier otro lugar. Eran jóvenes en busca de disfrutar de la vida mientras llegaban a su cercana mayoría de edad. En el camino charlaban o decían cualquier ocurrencia. Disfrutaban bajo el sol abrasador como amigos entrañables saboreando el largo camino. Andaban alegres, risueños y llenos de vida y su recompensa natural era el rio. Se les ofrecía como excepcional regalo dentro de la naturaleza del lugar. En el sublime rio Jarama podían amortiguar el calor con un baño reconfortante. Era idílico bañarse en sus aguas. Estaba envuelto por el esplendor de la naturaleza que, a su paso y serpenteando por el municipio de Uceda, creaba con sus aguas. Pero no solo ellos bajaban al rio a disfrutar de un baño, también los mayores, porque no había agua corriente en las casas, ni duchas, ni otro sitio donde nadar. Ahora gracias a que hicieron una piscina municipal podemos aprovecharla para pegarnos un baño donde amortiguar el excesivo calor del verano y en aguas limpias y desinfectadas. Hay que darles las gracias a todos los que los que proyectaron y realizaron dicha obra y a los vecinos que las pagaron con sus impuestos. Y sin bajar y subir. Si los vecinos lo consideran apropiado se podía mirar el cerrarla y calentar el recinto y el agua con energía solar en su mayor medida para aprovecharla todo el año. Pero recordando un tiempo aun cercano e intentando que no se olvide nombro algunos sitios donde nos bañábamos los vecinos de Uceda, estos son: las calderas, la presa de agroman, los coloradillos, la barca vieja, la presilla, el pozo las truchas, el roncadero, Prada, el soto, el Pontón de la Oliva etc. – ¡No te tires!- grito asustado, un amigo de Madrid de los niños del pueblo que por primera vez había bajado a darse un chapuzón, al verle encamado en lo más alto de la presa y habiendo subido por una escalerillas de hierro sujetadas a la pared. No le hizo caso y se tiro de lo más alto de la preso conocida como de agroman (Presa de Vandentales’) A cualquiera verle lanzarse desde allí le quitaba hipo. Se lanzo desde lo más alto Angete (Hoy ya mayor Ángel), como otros también, de cabeza para zambullirse en las profundidades del agua. Le gustaba realizar el salto del Ángel. Había peligro, además de la altura desde que se lanzaba con lo que había que saber caer y hacer bien la entrada en el agua, tenía que haber profundidad y había que cerciorarse de que no había una rama sumergida donde se iba a caer en las aguas del rio Jarama. Era un trampolín improvisado desde donde lanzarse al agua y disfrutar del subidón de adrenalina. Pienso que es mejor en la época en que vivimos lanzarse desde una piscina con trampolín. Recuerdo lo que las madres decían a sus hijos recordándoselo constantemente: -"El rio es muy peligroso, hay corrientes y remolinos y hasta el mejor nadador se ahogo-". Y así es. El rio es peligroso y además como también recordaban las madres "hay que hacer la digestión antes de meterte en el agua”. Como es un consejo que hoy en día se toma muy a la ligera y creo que es muy importante he copiado algunos extractos de texto que se refieren ello: El agua, sobre todo si está fría, produce vasoconstricción (cierre de las arterias), pudiendo ser un factor determinante en el colapso de las personas que se bañan inmediatamente después haber comido". Explica el especialista que muchas veces, bañarse en los ríos, presas, pantanos o el mar implica un esfuerzo físico que exige mayor cantidad de sangre en el sistema músculo-esquelético. "Y si la sangre está concentrada en ese momento en la digestión, puede que le falte críticamente al cerebro o al corazón (miocardio) pudiendo causar colapso. A veces no pasa de sufrir un simple calambre, pero en ocasiones, puede ocurrir la muerte .Hay que ser prudentes y educar a los niños desde pequeños diciéndoles que conviene esperar un par de horas tras la comida antes de bañarse. Los médicos recomiendan no exponerse directamente al sol durante la comida ni en las horas posteriores y, en caso de querer refrescarse un poco en el agua, es preferible hacerlo progresivamente, nunca zambulléndose de forma brusca, normalmente se conoce este fenómeno como corte de digestión por error, porque muchas veces se produce tras una comida copiosa, cuando se ha estado expuesto al sol durante mucho tiempo y la persona se sumerge en agua fría de forma fortuita. No siempre se produce una reacción negativa, pero se puede llegar a la parada cardíaca y la muerte Pero la creencia popular, que apunta a la digestión como desencadenante del problema, tampoco está tan desencaminada. «Aunque el fenómeno médico sea el síncope de hidrocución, muchas veces está relacionado con la digestión, que aumenta los riesgos. Al meterte al agua de golpe lo que ocurre es que se produce un colapso cardio circulatorio provocado por la diferencia de temperatura entre la piel y el agua, que lleva a un secuestro de sangre hacia la piel. El cuerpo intenta guardar el riego del cerebro y no lo consigue, por lo que se pierde la consciencia y en el agua te ahogas. Lo cierto es que el corte de digestión nos puede afectar a todos por igual, ya que cuando el organismo está haciendo la digestión y se sumerge en agua fría, se produce un déficit de sangre en el sistema digestivo, debido a que ésta se desplaza hacia la piel para equilibrar el cambio de temperatura y, entonces, se puede producir un corte de digestión. Esto puede ocurrir también cuando nos sumergimos en agua fría después tomar el sol o realizar ejercicio físico. Por tanto, hay que tener especial cuidado con los niños, que son los que más disfrutan del agua a todas horas. Los síntomas más frecuentes del corte de digestión son mareos, vómitos, calambres, escalofríos, náuseas y sudor. Ante cualquiera de estos síntomas, hay que sacar al niño inmediatamente del agua, para minimizar el riesgo de sufrir un paro cardiaco. Es conveniente esperar entre una hora y media o dos horas antes de bañarnos y una vez transcurrido ese tiempo, es recomendable mentalizar a los niños para que se metan poco a poco en el agua para ir acostumbrando al cuerpo y evitar que se tiren de golpe, de cabeza o de bomba.". Hay que tener cuidado del rio cuando va crecido y en verano ya que cada año cambia tras las crecidas del invierno. Cambia su cauce, la situación de los pozos, de sus remolinos y corrientes y pueden haber ramas del arboles caídos sumergidos en sus aguas. Para recordar tantas tardes de rio vividas por los vecinos que mejor que algunas fotos de los lugares donde durante tiempo los habitantes de Uceda se han bañado. Pienso que hay que cuidar al rio. Es un legado para dejar a nuestras futuras generaciones. El rio es vida.

LA PRESILLA O PRESA